Esta entrada no pretende ser más que una breve reflexión personal acerca de un formato fotográfico que se prevee de futuro, en el ámbito patrimonial (1).
En estos momentos, el papel de master digital en los archivos de fotografías, las fototecas y otros espacios de conservación y gestión de la imagen, está dominado mayoritariamente por el TIFF_UNC y, en segundo lugar y dependiendo de la institución, por el RAW (¿o sería más correcto decir RAW's?). Ambos formatos tienen sus ventajas y sus desventajas. El TIFF_UNC resulta interesante porque es un formato básico sin compresión que presenta un conjunto de elementos favorables que podríamos resumir en:
Nos hallamos por tanto en un espacio dominado por masters TIFF_UNC y RAW. Ambos formatos normalizados y fáciles de migrar. En este contexto aparace un nuevo actor: el formato JPEG2000 que analizaremos a continuación manteniendo una tesis central: su patente e incuestionable superioridad frente al TIFF_UNC y el RAW como fichero master del archivo de preservación. Efectivamente, el JPEG2000, es una auténtica pasada y posee una gran cantidad de ventajas frente a su rival directo: el TIFF. Repasemos algunas de ellas:
(1) Gran parte de la información en la que nos basamos proviene del Curso realizado en el COBDC a cargo del reconocido profesional David Iglesias Franch, uno de los miembros de una institución que es todo un referente a nivel de conservación y gestión de imagen: el Centre de Recerca i Difusió de la Imatge. IGLESIAS FRANCH, D. Fotografia digital i patrimonia documental: anàlisi tècnica i bases per a l'organització d'una col·lecció. Barcelona: Col·legi Oficial de Bibliotecaris-Documentalistes de Catalunya, 2008. A su vez, las clases y discusiones mantenidas en el módulo "Los tipos de formatos digitales" del curso Experto en gestión y tratamiento de imágenes en entornos digitales de AEDOC, a cargo del destacado experto Luís Torres Freixinet han servido de base y motivación para la presente reflexión.
(2) No es un formato a perder de vista, pues existen inciativas como OpenRAW o el DNG 1.1 (Adobe Digital Negative) que tratan de uniformizar este "formato de formatos".
En estos momentos, el papel de master digital en los archivos de fotografías, las fototecas y otros espacios de conservación y gestión de la imagen, está dominado mayoritariamente por el TIFF_UNC y, en segundo lugar y dependiendo de la institución, por el RAW (¿o sería más correcto decir RAW's?). Ambos formatos tienen sus ventajas y sus desventajas. El TIFF_UNC resulta interesante porque es un formato básico sin compresión que presenta un conjunto de elementos favorables que podríamos resumir en:
- es un formato ideal para la descripción, el almacenamiento y el intercambio de datos
- usa etiquetas variables y extensibles que contiene metadatos
- permite una excelente calidad de la imagen y es muy apto para la impresión
- está diseñado para ser extensible y adaptarse a la evolución tecnológica
- puede describir imágenes bitonales, escala de grises, paleta de color y color verdadero en diferentes espacios de color
- es compatible con alta profundidad de color
- es usado por una extensa comunidad
- tiene publicadas sus especificaciones
- es compatible con una gran cantidad de software
- el tiempo de codificación y descodificación es breve
Nos hallamos por tanto en un espacio dominado por masters TIFF_UNC y RAW. Ambos formatos normalizados y fáciles de migrar. En este contexto aparace un nuevo actor: el formato JPEG2000 que analizaremos a continuación manteniendo una tesis central: su patente e incuestionable superioridad frente al TIFF_UNC y el RAW como fichero master del archivo de preservación. Efectivamente, el JPEG2000, es una auténtica pasada y posee una gran cantidad de ventajas frente a su rival directo: el TIFF. Repasemos algunas de ellas:
- es capaz soportar diferentes resoluciones en un solo fichero ¿qué significa esto? que nos podemos olvidar de tener que conservar diversos formatos para funciones distintas (un formato para conservación, otro para visualización web...). Tendríamos un solo formato para todo y esto a nivel de organización, a nivel de gestión y a nivel de espacio, es sencillamente fantástico.
- Posee una gran calidad y ocupa menos. El JPEG2000 no trabaja de forma secuencial (baseline) sino que comprime por wavelets (Discreta Wavelet DWT), con frecuencias mediante ondas lo que permite una pérdida menor de detalle. Tiene una compresión con mejores ratios.
- Es un formato de futuro: es capaz de soportar metadatos extensibles en XML e información IPTC y esto, a las puertas de la web 2.0, resulta muy atractivo. Además posee equivalencias con Dublin Core.
- Dispone de especificaciones publicadas
- Está aprobado como estándar
(1) Gran parte de la información en la que nos basamos proviene del Curso realizado en el COBDC a cargo del reconocido profesional David Iglesias Franch, uno de los miembros de una institución que es todo un referente a nivel de conservación y gestión de imagen: el Centre de Recerca i Difusió de la Imatge. IGLESIAS FRANCH, D. Fotografia digital i patrimonia documental: anàlisi tècnica i bases per a l'organització d'una col·lecció. Barcelona: Col·legi Oficial de Bibliotecaris-Documentalistes de Catalunya, 2008. A su vez, las clases y discusiones mantenidas en el módulo "Los tipos de formatos digitales" del curso Experto en gestión y tratamiento de imágenes en entornos digitales de AEDOC, a cargo del destacado experto Luís Torres Freixinet han servido de base y motivación para la presente reflexión.
(2) No es un formato a perder de vista, pues existen inciativas como OpenRAW o el DNG 1.1 (Adobe Digital Negative) que tratan de uniformizar este "formato de formatos".
Interesantísimo artículo Johny! Fijo que se acaba extendiendo el uso del JPEG2000, como ya lo hizo el JPEG en su momento. Jejejeje. Lo que aprende uno macho.
ResponderEliminarSigue así y nosotros leyéndote
Cuando uno se aventura a dar clases pueden suceder muchas cosas, pero después de tantos años en el tajo, sigue siendo igual de gratificante el encontrar personas con ganas de aprender y COMPARTIR.
ResponderEliminarY tu precisamente has sido uno de ellos, no el único, pero si de los más activos!!! Y eso es de agradecer,
incentiva el esfuerzo de sacar unas horas (todavía no se donde)para compartir.
Porque precisamente esa es una de las carencias más importantes, lo que yo denomino "el sindrome del último mohicano". Parece que en lo digital (sobre todo en el ámbito del patrimonio documental) funcionamos aislados, sin contactos. Y yo estoy empeñado desde hace unos años en romper esa tendencia, ese aislamiento que lo único que produce muchas veces es frustación y pocas alegrías.
Bueno que me enrollo.
Sólo comentar con respecto a tu artículo que el salto a jpeg2000 se puede producir en cualquier momento, pero mientras tienes que trabajar de alguna manera, amoldándote a tus carencias y necesidades...
Como siempre digo el riesgo no está en tomar la decisión el riesgo está en no saber las consecuencias de la decisión que has tomado.
Un saludo.
http://zaragozaciudad.net/aycarajo/ (mi blog)
LUIS TORRES
Yeah!
ResponderEliminarYa veo que aquí se ha apuntado más gente que conozco!!! :-)
Este formato que comentas parece que tiene muy buena pinta pero el nombre ya me tira un poco pa'trás ya que JPEG para mi significa compresión y pérdida de información. Según te he ido leyendo veo que el JPEG tiene un ratio de compresión mejor y con menos pérdidas pero a la hora de imprimir y tal, ¿qué? ¿No es mejor tener cuanta más información posible sobre el archivo para hacer ampliaciones?
No se, todo el tema del RAW dá un poco de miedo, la plataforma OpenRAW me parece muy bien pero no veo que hayan avances en las grandes empresas para adaptar todo esto a un estandarte. Yo he empezado a guardar mis mejores fotos en TIFF, de momento me parece lo más seguro.
Un abrazo
Hola David, el JPEG2000 puede ser con pérdidas y sin pérdidas de calidad. Con pérdidas es mucho más eficiente y ofrece más calidad que el JPEG. Sin pérdidas comprime más que un TIFF_UNC.
ResponderEliminarA nivel de fotógrafo, como es tu caso, lo mejor es guardar en RAW y TIFF. Los TIFF los podrías guardar en CMYK y estarían ya tratados. Listos para una impresión y preparados para una futura migración de formato. Los RAW serían tu negativo. Podrías hacer esto porque en colecciones pequeñas, como las de un único fotógrafo, el espacio no representa un coste ecónomico importante. Los discos duros están bien de precio y ofrecen grandes cantidades de espacio. Sin embargo cuando hablamos de colecciones grandes, en contextos de archivos o fototecas, sí que es un coste económico importante. Sino pregúntale a Luis que ya va de camino de los 5 Tb y creciendo...
Gracias a los tres por vuestros comentarios y por pasaros por aqui. Sois una fuente de motivación!
Vale, gracias por la aclaración.
ResponderEliminarYo conservo los RAW's y como te decía las fotos tratadas las guardo en TIFF.
Para presentarlas en internet obviamente utilizo el jpg cutrillo que con resoluciones pequeñas hay que reconocer que es un punto.
De todos modos lo mejor es ir a una buena exposición fotográfica y fliparlo :-) Ahí ni jpg ni nada... la realidad!!